Por: Jassmin Espitia y Kerina Guevara.
Estudiantes de undécimo grado I.E.D. Instituto Técnico de Comercio Barranquilla
La publicidad se ha encargado desde hace muchísimos años de seguir creando estereotipos en la sociedad.
La publicidad que vemos diario en la televisión sólo afianza estas falsas creencias que ha creado la humanidad, ya que finalmente terminamos dando por verídico todo lo que vemos en la televisión.
También las personas han creado estereotipos y roles que deben cumplir los demás con respecto a su género, posición económica, aspecto físico, religión y otras contingencias.
La publicidad que vemos diario en la televisión sólo afianza estas falsas creencias que ha creado la humanidad, ya que finalmente terminamos dando por verídico todo lo que vemos en la televisión.
Los estereotipos que impulsa el comercio a través de los medios, pretenden indicarle a cada persona cómo debe comportarse.
Sin embargo, la publicidad siempre intenta hacer parecer mínima su estereotipación, aunque el hecho de que se utilice tan comúnmente, ya denota que no es algo inofensivo por más que quieran hacérnoslo ver de esta forma.
Los estereotipos que impulsa el comercio a través de los medios, pretenden indicarle a cada persona cómo debe comportarse si desea que los demás lo perciban como "aceptable", “cool”, “inn” o “chévere”.
Parecería ser que es así como lo ha dictado la sociedad, el hombre puede divertirse y explorar mucho más que una mujer que debe ser recatada y siempre cuidar muy bien su comportamiento.
Y así, llegamos a la pregunta: ¿Qué tanto influyen en nosotros los estereotipos que vemos en la publicidad?
La respuesta podemos buscarla desde el análisis de un comercial común. En la pieza publicitaria, se muestra un parque en el que niños varones juegan a las carreras y al fútbol ocupando casi todo el espacio disponible, mientras que las niñas, por otro lado, se reducen a sentarse en un lugar reducido y específico para jugar a las muñecas.
Parecería ser que es así como lo ha dictado la sociedad, el hombre puede divertirse y explorar mucho más que una mujer que debe ser recatada y siempre cuidar muy bien su comportamiento, porque, de otra forma esto no será bien visto por la comunidad.
De la influencia de la publicidad parece no salvarse nadie. Afecta a todos con sus estereotipos, desde niños pequeños hasta adolescentes, jóvenes y adultos.
Si un niño y una niña de entre 5 y 6 años llegase a ver este anuncio, de forma inmediata lo procesarán como aquello que deben hacer según su género. La niña, pensará que debe ser como esas niñas que ha visto en la televisión, reprimiendo sus posibles ganas de correr por aquel parque, sin saber que ella también es libre de explorar todo lo que desee. Por otro lado, el niño, se verá guiado a comportarse como "niño", cuando quizás lo único que desea en realidad es sentarse a jugar cualquier otra cosa.
De la influencia de la publicidad parece no salvarse nadie. Afecta a todos con sus estereotipos, desde niños pequeños hasta adolescentes, jóvenes y adultos. Define las acciones que deberían realizar los individuos tan solo por tener una edad determinada.
Los estereotipos en la publicidad son muy diversos, y se crean para una única razón: ganar audiencia.
Los estereotipos en la publicidad influyen en nuestra vida más de lo que creemos. Un simple anuncio que nos pareció irrelevante cuando íbamos camino a algún lugar, puede llegar a influenciarnos de la forma que menos creemos. Los anuncios no sólo logran encaminarnos a hacer algo, sino que también, nos hacen pensar acorde con esos estereotipos. De esta manera, nos orientan incluso a pensar que una persona debería comportarse como lo han determinado terceros. Así, y sin percatarnos, nos convertimos en parte del problema.
Los estereotipos en la publicidad son muy diversos, y se crean para una única razón: ganar audiencia. Por esto, cuando intentan ser "inclusivos", tan solo es una fachada, dejándonos envolver fácilmente justo como lo habíamos permitido anteriormente.
Por todo lo anterior, no podemos permitir que la publicidad llene nuestra visión de cosas que realmente no son para nada relevantes, pues, la sociedad aún con estereotipos ha decidido romper estas reglas, dejándonos en claro que los estereotipos no son más que falsos espejos que las personas desean ver, y tú no estás obligado a satisfacerlos con ello.
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