Por: Rouse Cortés
Estudiante I.E.D. HOGAR MARIANO
El feminismo es considerado un movimiento por medio del cual se busca la igualdad de derechos entre hombres y mujeres y que se ve reflejado en varios ámbitos como la política, la cultura, la economía y la sociedad. Pero... ¿qué pasaría si cambiáramos la palabra movimiento por sentimiento? De alguna u otra manera se sigue buscando lo mismo: Igualdad. Sin embargo, se plantea de una manera diferente y observándolo desde afuera de una manera más carnal.
El feminismo ha permitido que la sociedad se transforme, conquistando para las mujeres la voz y el voto así como la libertad de decidir la profesión que queremos desempeñar. No obstante estos evidentes logros, algunos afirman que el feminismo vulnera a las mujeres, aseveración extraña si se tiene en cuenta que se lucha por ellas. La mayoría apoya la igualdad y la percepción de que como seres humanos también sentimos, pese a que algunos consideran que el feminismo es odiar al sexo masculino.
Pero, volviendo a las conquistas, nos damos cuenta que el feminismo ha tenido una importante repercusión en la legislación de muchos países, influyendo en amplias áreas del ordenamiento jurídico, con leyes contra la violencia de género o leyes de paridad electoral. Como ejemplos, están la Ley 581 de 2000 en Colombia que impone una cuota mínima del 30 % de mujeres, la Ley 7142 de 1990 de Costa Rica que impone un mínimo del 40 %; el Código Federal de Procedimientos Electorales de México que limita al 70 % la presencia de cualquiera de los sexos; la Ley para la Igualdad efectiva de mujeres y hombres en España en el 2007 que establece la obligación de paridad, o la resolución del Consejo Electoral Venezolano de 2008, que obliga a que las postulaciones de los partidos tengan un 50 % de mujeres. Grandes avances sin duda, pero lo que ningún país ha podido aprobar es la equivalencia entre el salario y trabajo.
El feminismo se ha encargado de no vulnerar lo que verdaderamente es la realidad, existen tipos de feminismo que luchan por la pluralidad de la palabra, basándose en los derechos psicológicos, domésticos, amorosos, decisión del cuerpo, entre otros.
El feminismo es un sentimiento de libertad que busca el bien común, que busca una vida plena tanto en hombres como mujeres, pero lamentablemente vive rodeado de críticas porque hay quienes no entienden el valor de la palabra feminismo, esto va bastante relacionado con el concepto erróneo que algunas feministas le dan encajando en grupos extremistas conocidos como: feminazis. Las feminazis intentan darle un giro totalmente diferente al feminismo con el agravante de que se hacen notar más y proyectan una imagen peyorativa hacia el sentir feminista. Las feminazis muchas veces tienen ideales radicales y su búsqueda de la igualdad entre hombres y mujeres se hace difusa y a veces contradictoria.
Finalmente el feminismo no lo podríamos considerar como un movimiento debido que la igualdad no debería ser una razón por la cual las personas señalen lo que es correcto tanto para la mujer como para el hombre. La igualdad busca que haya un equilibrio dentro de lo estipulado, y para que la igualdad sea lo relevante, tal vez no sería conveniente verla como un movimiento.
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