Por: VANESSA BARRIOS BAZA, KEYLA CALDERÓN SIERRA, TATIANA MENDOZA VILLADIEGO
Estudiantes de Undécimo grado de la I.E.D. Instituto Técnico De Comercio Barranquilla.
Cuando escuchamos la palabra: “discapacidad” la mayor parte del tiempo se piensa en alguien que va en silla de ruedas, una persona inválida que no se puede valer por sí misma, alguien vulnerable, o en un término mucho más abrupto: "fenómeno".
Cuando vemos a una persona con discapacidades, es de esperar que reciba ayuda de un tercero. Sin embargo, al referirnos a las discapacidades del sistema sensorial, no solemos saber cómo actuar o reaccionar. Pero… ¿Cuál es el Sistema Sensorial? Pues se trata del sistema que nos permite captar por medio de una serie de señales. A través de lo que conocemos como: los cinco sentidos.
Para un sordomudo es muy difícil hablar bien, ya que el no poder escucharse a sí mismo, puede derivar en una deficiente pronunciación.
No hay igualdad para los discapacitados sensoriales y es tal vez por esto que muchos abusan de ellos. Carecemos de empatía y tolerancia. Y es que, por ejemplo, las personas que son sordomudas tienen ocasionalmente dificultades para hacerse entender. Sucede que, en su gran mayoría, cuando una persona sordomuda intenta comunicarse usando su voz, su dicción sale en graznidos. Justo allí, sobrevienen las burlas y el señalamiento llamándoles denigrantemente fenómenos.
Para un sordomudo es muy difícil hablar bien, ya que el no poder escucharse a sí mismo, puede derivar en una deficiente pronunciación.
En nuestra opinión, somos las mismas personas que exigimos la igualdad entre los pobres y ricos, heterosexuales y homosexuales, bisexuales, transgéneros y otros, quienes pocas veces nos fijamos en su situación. Cometemos estas atrocidades haciendo ver a los discapacitados como débiles o vulnerables y asimismo, con menos derechos que el resto.
Realmente es una pena que seamos tan ignorantes de todo lo que deben padecer estas personas día a día.
Pensamos que debemos aprender a medir cómo nos dirigimos a ellos. De hecho, no abogamos por un trato muy diferente al que dignamente debe dársele a todo ser humano. Seamos prudentes y recordemos que ante su discapacidad conviene ser empáticos, evitando ante todo las ofensas y previniendo el hacerles sentir incómodos en razón de su condición.
En todos nosotros está, día a día, la oportunidad de construir una sociedad más equitativa, igualitaria y justa.
Es muy interesante lo que plantean. Hay varias formas de volvernos más inclusivos y todo empieza por el respeto, la empatía y la comprensión. Pero también hay que hacer al sistema más inclusivo frente a estos temas. Una buena idea sería aprender lengua de señas desde los colegios. Espero que el sistema educativo lo permita en algún momento. 😊